Asimismo, se instala en el palmeral de la alcazaba un mercado medieval y varias jaimas donde disfrutar de la fiesta y del ambiente.
En el fin de semana siguiente, bajo el lema "Dos ciudades, una historia común" las conmemoraciones siguen en Marvão, localidad portuguesa que debe su nombre a Ibn Marwan al-Yil'liqui.
[3] La fiesta tiene su origen en 1998 por iniciativa de la Asociación Amigos de Badajoz, y pronto los ciudadanos se aficionaron a ella, pero debido a que no fue ayudada ni reconocida por las instituciones no fue posible celebrarla un año, lo que desencadenó las protestas de los asiduos a las fiestas.
Desde entonces es el gobierno municipal el que se encarga de su organización y presupuesto.
Durante las últimas celebraciones el esquema de actos en esta festividad se ha mantenido, presentando mínimas variaciones.