Algoritmo adaptativo
Esta adaptación se basa en los cambios que ocurren en su entorno o en el propio programa, así como en la información disponible y en un mecanismo de recompensa predefinido.La información que utilizan para ajustar su comportamiento puede incluir la historia de los datos recibidos, detalles sobre los recursos computacionales disponibles y otros datos relevantes adquiridos durante la ejecución.[1][2] Los algoritmos adaptativos son capaces de aprender y ajustarse a nuevas condiciones, lo que les permite optimizar su rendimiento.Esto es importante porque quicksort tiene una complejidad promedio de O(nlogn), pero en el peor de los casos puede llegar a O(n2).Los algoritmos adaptativos se utilizan en una amplia variedad de campos,[3] incluyendo: