Alfredo Fressia

Integrante de la llamada Generación del 60, fue uno de los nombres claves de la poesía uruguaya contemporánea, junto a autores como Circe Maia, Washington Benavides, Cristina Peri Rossi, Hugo Achugar o Marosa di Giorgio.[2]​ De este modo, Fressia se convirtió en el primer poeta gay de Uruguay en expresar abiertamente en su escritura temáticas relacionadas con la homosexualidad masculina.[3]​ Fressia continuó abordando la diversidad sexual en varios de sus poemarios posteriores.[4]​ Desde el fin de la dictadura, en 1985, Fressia volvió sistemáticamente a Montevideo, donde residía al menos dos meses por año.[5]​ Además, fue traductor trilingüe de poesía en español, portugués y francés.