Sin embargo su calidad es notable y hay un renovado interés en sus cuadros.
A pesar de vivir en Europa durante varios años, su pintura conservó su identidad mexicana y regional.
Posteriormente se mudó a la ciudad de San Francisco, California.
Su primera exhibición individual la realizó en 1942 en la Galería de Arte Mexicano.
El mar era su otra gran pasión, por lo cual el agua está presenta en casi todos su cuadros, aunque sea en un pequeño vaso.