Aleksis Kivi nació en Nurmijärvi, Finlandia, en una familia de sastres.
Sólo él, entre numerosos hermanos y hermanas, pudo recibir instrucción, si bien no mostrase demasiada aptitud para los estudios.
En las escasas cartas que de él se han conservado habla con frecuencia de su precaria salud; humillado por su pobreza, esperó, sin embargo, poder situarse, y siguió manteniendo tal esperanza hasta el fin.
Su novela cumbre, Seitsemän veljestä (Siete hermanos), le llevó diez años de trabajo.
Debido al mal recibimiento de sus obras comenzó a beber.