Su obra literaria, no demasiado extensa, parece inclinarse por el ensayo, aunque también ha realizado incursiones en la narrativa breve.
Luego, preparó la antología José Gaos: Filosofía de la Filosofía (Crítica, 1989) y colaboró en libros como Philosophie und Rechtstheorie in Mexiko (Duncker & Humblot, Berlín, 1989) y en Philosophical Analysis in Latin America (Reidel Dordrecht, Holanda).
Formó parte luego del Consejo de Redacción hasta el último día en que se imprimió esta.
Un lugar pequeño en cuanto al espacio, medio oculto, de no fácil acceso, felizmente minoritario.
[cita requerida] En el primer libro de Rossi destaca, antes que nada, una insólita exactitud verbal, pero también la capacidad de observación, la fascinación por el detalle y por esa épica cotidiana que Eugenio Montale e Italo Svevo conocieron a fondo.
La vena paródica de Rossi encontró en el mundo del café literario y sus parroquianos un refugio ideal.
Es posible, claro, apuntar indicios y ensayar explicaciones, pero era difícil prever un giro de esta naturaleza.
Una vez superada la sorpresa inicial, al lector no le queda sino admitir la evidencia: Rossi, si cabe, es un escritor aún mejor de lo que creía.
En La fábula de las regiones, Rossi ha recreado un ambiente preciso, un ambiente hecho de hamacas, casas húmedas, vegetación lujuriosa, ríos desbordados, sudor pegajoso, mosquitos, tiranos, políticos corruptos, revueltas, guerras interminables y mentiras por todos lados.