Alarico comenzó su carrera bajo el mando del general godo Gainas, y más tarde se unió al ejército romano.
Decepcionado, dejó el ejército, fue elegido rey de los visigodos en 395 y marchó hacia Constantinopla hasta que fue alejado por fuerzas imperiales.
[8] En 401 Alarico invadió Italia, pero fue derrotado por Estilicón en Pollentia (la moderna Pollenza) el 6 de abril del 402.
Aunque los visigodos se dedicaron al pillaje de Roma, trataron a sus habitantes humanamente y sólo quemaron unos pocos edificios.
Su infancia transcurrió en el interior del Imperio romano, pues su pueblo había conseguido un pacto con el emperador Teodosio I y estaban asentados como foederati en Mesia desde el año 382, tras los acontecimientos que llevaron a la insurrección de los godos y la derrota y muerte del emperador de Oriente, Valente, en la batalla de Adrianópolis en 378.
Para evitar que las poblaciones provinciales sufrieran impuestos excesivos y ahorrar dinero, los emperadores empezaron a emplear unidades reclutadas de tribus germánicas.
[11] Arcadio mostró escaso interés en gobernar, dejando la mayor parte del poder verdadero en su prefecto pretoriano Rufino.
Honorio era aún menor; como guardián, Teodosio había nombrado al magister militum Estilicón.
Estilicón también reclamó ser guardián de Arcadio, causando gran rivalidad entre las cortes occidental y oriental.
Entre los visigodos asentados en la Baja Mesia (ahora parte de Bulgaria y Rumanía), la situación era propicia a la rebelión.
Esto, combinado con sus recompensas post-batallas, les impulsó a alzar a Alarico «sobre el escudo» y proclamarle rey; según Jordanes, un burócrata romano del siglo V de origen godo que más tarde se dedicó a la historia, tanto el nuevo rey como su pueblo decidieron «más buscar nuevos reinos por sí mismos, que dormitar en pacífico sometimiento al gobierno de otros».
[11] Los ejércitos del imperio de Oriente estaban ocupados con las incursiones hunas en Asia menor y Siria.
Según Claudiano, Estilicón estaba en una posición para destrozar a los godos cuando Arcadio le ordenó, por influencia de Rufino, dejar Iliria.
[20] Aquí continuó su conducta violenta hasta que el gobierno oriental lo nombró magister militum per Illyricum, dándole el mando romano que deseaba, así como la autoridad para reabastecer a sus hombres con los arsenales imperiales.
El joven emperador Arcadio encontraría una solución pactando con los visigodos, y consiguió asentar a Alarico y sus gentes en Iliria, zona que pertenecía por entonces al imperio oriental, pero que se disputaba con la parte occidental por su proximidad a Italia.
En el año 400, envalentonado y descontento con sus nuevas tierras, quizás ansioso de poder, Alarico marchó sobre Italia.
Según el poeta romano Claudiano, dijo que oyó una voz procedente de una arboleda sagrada, «Rompe todos los retrasos, Alarico.
No había «penetrado en la ciudad» pero su invasión de Italia produjo importantes resultados.
Alarico se había hecho amigo y aliado de su otrora oponente, Estilicón.
En la inseguridad que siguió por toda Italia, las esposas y los hijos de los foederati fueron asesinados.
[21] Esta vez no se derramó sangre; Alarico confió en el hambre como su arma más poderosa.
Con su consentimiento, estableció a un emperador rival, el prefecto de la ciudad, un griego llamado Prisco Atalo.
[21] Alarico destituyó a su poco efectivo emperador títere después de once meses y reabrió las negociaciones con Honorio.
Aparentemente, la defensa era imposible; hubo sospechas, no del todo acreditadas, de traición; la sorpresa es la explicación más plausible.
Roma, durante tanto tiempo victoriosa contra sus enemigos, estaba ahora a merced de sus conquistadores extranjeros.
[cita requerida] Alarico reclamó al emperador Honorio ser nombrado magister militum o general de los ejércitos del Imperio, ya que como romano de pleno derecho podía reclamar dicho honor, pero esa pretensión jamás se vería cumplida.
Los eruditos se preguntan a menudo sobre la causa de la muerte del rey Alarico.
Estos enterramientos repiten modelos escitas del Danubio inferior y el mar Negro.
[27] A Alarico le sucedió en el mando del ejército godo su cuñado Ataúlfo,[28] quien se casó con la hermana de Honorio, Gala Placidia, tres años después.