Aimaro el Monje es el nombre con el que se conocía en Tierra Santa a este prelado de la Toscana.
Realmente el nombre correspondía a su condición Monje de los Corbizzi, una ilustre familia originaria de Fiesole y Florencia.
Probablemente nació en esta última ciudad y murió en Palestina en 1202.
Fue arzobispo de Cesarea desde 1181.
Para poner fin a la vacante existente desde 1191, los canónigos del Santo Sepulcro, que querían a alguien que residiera en Oriente, le eligieron en 1194 como Patriarca de Jerusalén, cargo que ejerció hasta el día de su muerte.