Santo Sepulcro

La iglesia del Santo Sepulcro (en latín: Ecclesia Sancti Sepulchri), también conocida como basílica del Santo Sepulcro, iglesia de la Resurrección (en árabe: كنيسة القيامة‎ Kaneesat al-Qeyaamah; en hebreo: כנסיית הקבר‎ Knesiyat ha-Kever; en armenio: Սուրբ Յարութեան տաճար Surb Harut'ian Tachar) o iglesia de la Anástasis (en griego: Ναός της Αναστάσεως Naos tes Anastaseos), es un santuario cristiano situado en la Ciudad Vieja de Jerusalén.

[9]​ Constantino ordenó en torno al año 326 que el templo de Júpiter/Venus fuera reemplazado por una iglesia.

[12]​ Un año más tarde, Constantino y Elena financiaron la iglesia de la Natividad en Belén para conmemorar el nacimiento de Jesús.La iglesia del Santo Sepulcro fue construida como estructuras diferenciadas entre dos lugares sagrados: la gran basílica[13]​ (el Martyrium visitado por Egeria en torno a 380), un atrio cerrado y columnado (el Triportico) con el lugar asociado tradicionalmente al Calvario en una esquina, y a través de un patio,[6]​ la rotonda denominada Anastasis («Resurrección»), donde Elena y Macario creyeron que Jesucristo fue enterrado.

Eutiquio añade que Umar redactó un decreto prohibiendo a los musulmanes rezar en esta zona.

La Europa cristiana reaccionó con pavor y con la expulsión de judíos, sirviendo como precedente en las posteriores Cruzadas.

[21]​ Como compensación, la mezquita en Constantinopla reabrió al público y los sermones de la jutba se realizaron en honor a az-Zahir.

Las obras se centraron en la rotonda y los edificios anexos: la gran basílica continuó en ruinas».

La iglesia reconstruida albergaba «un patio abierto al cielo, con cinco pequeñas capillas anexas».

[22]​ Las capillas se encontraban al este del patio de resurrección (durante esta época, la tumba se encontraba al aire libre), donde había estado situado el muro occidental de la gran basílica.

Los peregrinos occidentales que llegaron a Jerusalén en el siglo XI encontraron gran parte del complejo en ruinas.

[23]​ Muchos historiadores mantienen que la preocupación del papa Urbano II, cuando convocó la Primera cruzada, fue la amenaza de una invasión turca de Constantinopla tras alcanzar Asia Menor en respuesta a la solicitud del emperador Alejo I Comneno.

Los historiadores también coinciden en que Jerusalén y la iglesia del Santo Sepulcro eran motivo de preocupación en 1095.

La idea de conquistar Jerusalén ganó adeptos a medida que comenzó la Cruzada.

Tanto la iglesia como la ciudad cayó en poder del sultán Saladino en 1187, aunque el tratado tras la Tercera cruzada permitió a los cristianos seguir peregrinando al santuario.

Los franciscanos reconstruyeron el Edículo («pequeño edificio»), ampliando la estructura para crear una antecámara.

El interior de la antecámara, ahora denominada capilla del Ángel, fue parcialmente reconstruida, cambiando su estructura semicircular por una cuadrada.

Durante los trabajos de remodelación entre 1970-78 y las excavaciones en el interior del edificio y bajo el cercano bazar Muristán, se descubrió que esta zona era originalmente una cantera de la que se extraía piedra caliza blanca meleke.

Otros decretos emitidos en 1852 y 1853 afirmaron que no se podían hacer cambios sin el consenso de las seis comunidades cristianas.

Estos firmanes recibieron reconocimiento internacional en el artículo 9 del Tratado de París (1856).

Las puertas de madera que componen la entrada principal son las originales, con arcos muy tallados.

Esta estrecha vía de acceso a una estructura tan grande ha demostrado ser peligrosa en ocasiones.

El Calvario está dividido en dos capillas: una ortodoxa griega y otra católica, cada una con su propio altar.

Las opiniones difieren en cuanto a si debe considerarse como la 13.ª Estación del Vía Crucis, que otros identifican como el descenso de Jesús de la cruz y se encuentra entre las estaciones 11.ª y 12.ª del Calvario.

[54]​ Inmediatamente dentro y a la izquierda de la entrada hay un banco, antiguamente un diván, que tradicionalmente ha sido utilizado por los porteros musulmanes de la iglesia, junto con algunos clérigos cristianos, así como el cableado eléctrico.

Bajo el statu quo , las iglesias ortodoxa oriental, católica romana y apostólica armenia tienen derechos sobre el interior de la tumba, y las tres comunidades celebran allí la Divina Liturgia/Santa Misa diariamente.

También se utiliza para otras ceremonias en ocasiones especiales, como la ceremonia del Sábado Santo del Fuego Sagrado dirigida por el patriarca ortodoxo griego (con la participación de los patriarcas copto y armenio).

Se accede a ella desde la Rotonda, por una puerta situada al oeste del Edículo.

Datan principalmente del siglo XIX y están diseñados en estilo ortodoxo postbizantino; fueron restaurados en 2021.

[69]​ En el lado noreste del complejo, se encuentra la Prisión de Cristo, supuestamente donde Jesús fue retenido.

Siempre teniendo como única fuente los Evangelios, la tumba estaría situada en un jardín próximo a la roca —o montaña, o montículo; los evangelios dicen lugar— donde se produjo la Crucifixión, llamado originalmente Gólgota y luego Calvario (lat.

Iglesia del Santo Sepulcro
Diagrama de la iglesia del Santo Sepulcro que muestra los lugares tradicionales del Calvario y el Sepulcro de Jesús .
Planta del edificio en el siglo IV
Basílica del Santo Sepulcro durante la época bizantina .
Planta del edificio en el siglo XIX
El nuevo Edículo, construido tras el incendio de 1808.
Fachada y parvis de la Iglesia.
Campanario, ubicado a la izquierda de la entrada.
Puerta de entrada.
El Altar de la Crucifixión, debajo del cual se encuentra la roca original del Calvario, protegida por un panel de vidrio.
Representación en mosaico del cuerpo de Cristo siendo preparado después de su muerte, frente a la Piedra de la Unción.
La Piedra de la Unción, donde se dice que fue ungido el cuerpo de Jesús antes del entierro. Al fondo a la derecha, se pueden apreciar las escaleras de acceso al Gólgota.
Altar en la capilla siriaca.
Arcos de la Virgen.
Según la tradición en este lugar encarcelaron a Jesús.
Capilla de Santa Elena.
Entrada de acceso a la Capilla de San Vardan.
Capilla de la Invención de la Santa Cruz.
El Santo Sepulcro; incunable de Bernardo de Breidenbach : Sanctae peregrinationes ( Maguncia , 1486).