El ahorro es una de las variables más importantes del ciclo económico y lo afecta directamente.[1] Desde tiempos antiguos ya se manejaba esta actividad, aunque no con bienes económicos principalmente.El el caso de que exista gasto público (G) con creación de deuda o dinero, así como impuestos (T), la igualdad (2) debe ser modificada a: (4)El ahorro se encuentra influido y determinado por las políticas económicas que siga un Estado (este puede afectar las tasas de interés y otras variables que afectan el ahorro).Así como el aumento de las tasas de interés puede incentivar a los socorristas a consumir menos para ahorrar más, puede suceder que, al ser mayor el rendimiento del ahorro, se pueda cumplir la meta de acumulación prevista destinando una porción mayor del ingreso al consumo presente.Esta alza en las tasas de interés se puede deber, por ejemplo, a las formas en que el gobierno obtiene los recursos para sus actividades.Si el gobierno decide pedir recursos prestados al sistema financiero en una cantidad importante, las tasas de interés subirán.El ahorro es igualmente importante para el futuro y el presente económico de cualquier nación.La producción de una empresa, por ejemplo, involucra algunos recursos que son limitados, como la tierra.Si esta quiere mejorar su producción y tiene problemas con recursos limitados, debe buscar cómo mejorar su producción basándose en inversiones (por ejemplo en tecnología o en máquinas).Igualmente, si los bancos tienen más ahorros en las cuentas, tendrán más dinero para prestar y no será necesario que las personas, las empresas o el Estado pidan recursos en el exterior.Esto, en general, facilita e incentiva la actividad económica y el crecimiento en un país.Con todo, parece razonable llegar a la conclusión de que, a juzgar por la evidencia empírica, los elevados impuestos que financian sectores públicos de gran magnitud suelen afectar negativamente al ahorro y, en consecuencia, a la inversión y al crecimiento.Especialmente los impuestos sobre las sociedades, aunque también otros impuestos sobre las rentas del capital, son probablemente la causa de una disminución del ahorro privado en la medida en que reducen su rendimiento neto.[7] La propensión marginal al ahorro (PMA) es el porcentaje que se destina al ahorro de cada unidad monetaria (euro, dólar, peso, etc.) adicional que se recibe.Así pues, sabemos que siempre y en todo lugar PMA = 1 - PMC.