Ahhotep

Esta dinastía estaba conformada por un pueblo asiático, los hicsos, que habían invadido Egipto sesenta años antes.

De no ser por la educación patriótica e inconformista que dio a sus hijos Tetisheri la historia hubiera sido bien distinta.

Al morir su padre, asumió el trono tebano el hermano mayor de Ahhotep, Seqenenra Taa, con quien tuvo que casarse, siguiendo las ancestrales costumbres.

Pese a que el nuevo rey también estaría casado, Ahhotep siguió llevando la voz cantante mientras asumía la regencia en Tebas, y para la ciudad las cosas no habían cambiado en absoluto.

Con Ahmose se inaugura el Imperio Nuevo egipcio, la etapa más brillante y en la que el país alcanzó el mayor esplendor internacional de toda su historia.

La deuda que Ahmose y todo Egipto tenía con la reina madre Ahhotep nunca se podría salvar.

Cuando Ahmose fue lo suficientemente mayor como para gobernar por sí solo, Ahhotep se retiró al templo de Karnak y allí parece ser que vivió hasta que le llegó la muerte, a muy avanzada edad.

Tiraron las vendas y huesos mientras del ajuar funerario dieron aviso al virrey, que ordenó le fuera enviado a palacio.

Su excepcional calidad y belleza hizo que fuesen enviadas a la Exposición Universal de París en 1867.

Anillos de Ahhotep.