Agustín González Ruano
Agustín González Ruano (Sevilla, siglo XIX-Montemayor, 1899) fue un periodista y cronista español.Nacido en Sevilla, fue guardia de corps.[1] Después de la desaparición de estos marchó a Córdoba y se casó con Juana Luque –propietaria de Montemayor– y se instaló en la ciudad, tomando parte muy activa en el periodismo, en la Academia, donde entró en 1860, en tertulias literarias y hasta en las veladas ateneístas –aunque no como orador– y en los juegos florales.[1] Se distinguió por sus artículos festivos y de costumbres, escritos, en palabras de Rafael Ramírez de Arellano, «con gracia chispeante».[1] Los últimos años, casi ciego y casi pobre, los pasó retirado en Montemayor, donde tenía algún caudal heredado de su mujer.