En 1935 se inició como novicio, lo que le comportó, al estallar la guerra civil española, ser internado en el barco prisión Mahón y más tarde reclutado en la «leva del biberón» para luchar en la batalla del Ebro.
Hecho prisionero por las tropas franquistas, fue internado en 1939 en el campo de concentración de Orduña hasta al fin del conflicto.
En 1940 fue profesor del colegio La Salle Bonanova de 1949 y, desde 1957, fue catequista entre las zonas más deprimidas de Sants y del Somorrostro.
[2] En los años siguientes se dedicó a atender personas dedicadas a la prostitución, en la prisión, afectadas por el sida o la drogadicción.
Su última voluntad fue donar su cuerpo a la ciencia.