Adèle tuvo un cambio de corazón, queriendo reconciliarse con Pinson, pero este se negó a involucrarse más con ella.
Pinson continuó su carrera militar, siendo enviado al Regimiento de Infantería en Bedfordshire en 1856, donde rara vez vio a Adèle.
Ádèle llevaba una vida aislada en Halifax y se dedicaba a acecharle cada día.
Finalmente, escribió a casa diciendo que Pinson la había abandonado, y su padre le envió una asignación mensual.
Su trágica vida fue llevada al cine en 1975 en Diario íntimo de Adèle H., película dirigida por François Truffaut.
También su vida y su obsesión con Pinson se plasmó en 1993 en el libro Adèle Hugo: La Misérable, de Leslie Smith Dow.