Debido a la derrota árabe en la Guerra de los Seis Días en junio de 1967 las Fuerzas Armadas Reales Jordanas se encontraban en un crisis de moral, cuando las facciones armadas de la OLP se volvían progresivamente más agresivas.
Además estalló la batalla de Karame, en marzo de 1968, la que añadió confidencia a ambos OLP y FARJ, la tensión solo aumentaba.
El acuerdo obligó a los miembros de ambos grupos las siguientes prohibiciones: y también: Los guerreros palestinos pasaron por alto el acuerdo y continuaron violándolo.
Entonces FARJ y los guerreros de la OLP lucharon en las calles de Amán y 300 personas fueron asesinadas.
La violencia continuaba hasta los sucesos de Septiembre Negro, la guerra civil jordana.