La fuente del Almendral llegó a ofrecer hasta 20 litros de agua por segundo y estuvo en servicio para abastecer las fuentes públicas durante casi trescientos años, y todavía permaneció activa hasta el siglo XX.
[6] A partir de este momento y hasta 1930, durante doscientos años, las obras nunca concluyeron.
[7] A ello siguió el boicot del cabildo municipal a las decisiones del Consejo: cuando este disolvió la junta de obras el municipio paralizó el proyecto y el pago de salarios[7] y en 1738 proseguía el contencioso.
[8] En 1742, con las obras paradas y recaudándose ininterrumpídamente los impuestos locales que las deberían financiar, el tesorero de las mismas renunció por haberse "detraído indebidamente" dinero, y en 1781 la construcción del Acueducto de San Telmo convirtió definitivamente en innecesaria la obra.
[1] En total se completaron en la obra 5,5 kilómetros delos 31,24 que estaban proyectados, la mitad de los cuales correspondían a la conducción y puente sobre el Guadalhorce.
[1][12] Del arca parten en dirección norte los primeros tramos del acueducto[12] que en buena parte se conservan, al aire o soterrados, en unos 50/60 metros cruzando varias fincas hasta que queda cortado por la carretera de Alhaurín.
Al otro lado de la vía pasa casi todo el tramo soterrado a través fincas particulares.
En el trayecto se pueden observar restos de antiguos molinos a los que servía el acueducto.
[1] Desde el Tabico hasta el Peñón-Zapata, el trazado discurre por una zona habitada —donde sirve de linde—, salva una depresión y poco después un arroyo para lo que se llega a elevar hasta 5,00 metros y se abren tres ojos, presentando a la vista gran monumentalidad por los arcos empleados.