Acondicionamiento acústico

La finalidad de acondicionar acústicamente un determinado recinto (cerrado o al aire libre) es lograr que el sonido proveniente de una fuente o fuentes sea irradiado por igual en todas direcciones logrando un campo sonoro difuso ideal.

La principal herramienta con que cuentan los técnicos encargados del acondicionamiento acústico de un determinado local/lugar es conocer el tiempo de reverberación específico, que se calcula utilizando diversas fórmulas (Sabinne es el modelo más conocido).

Por ejemplo, no será necesaria la misma reverberación en un auditorio que en una sala de grabación.

Dentro de los recintos cerrados, es fundamental conseguir un equilibrio adecuado entre el sonido directo y el campo sonoro reverberante.

Como ya se había citado anteriormente a la hora de acondicionar una sala tenemos tres tipos de materiales que nos ayudarán a conseguir este acondicionamiento: 1.º Materiales absorbentes: Los empleamos a la hora de querer absorber sonido en una sala ya sea con los materiales convencionales o los selectivos, también conocidos como resonadores, que actúan en frecuencias específicas.