[1] El Expreso del Norte viajaba desde la estación fronteriza española de Irún, en la frontera franco-española, hasta Madrid.
[1] Según la crónica de Juan Bautista Neira, viajero en el tren accidentado, para La Ilustración Española y Americana: «...vamos a decir algo del descarrilamiento.
En nuestro juicio, tuvo lugar sin más causas que la excesiva velocidad y la desigual resistencia del suelo metálico al de tierra.
Sepultadas en ésta las dos máquinas, la velocidad adquirida por el tren se anuló, aplastándose, penetrándose y encajonándose en uno lo menos seis coches de la mitad anterior: atestados de viajeros, imaginen nuestros lectores cuántas víctimas habrán quedado allí, embutidas entre tableros, astillas y tablones».
[2] Fernando Calderón Collantes, quien posteriormente fuera presidente del Tribunal Supremo de España, viajaba en el tren y sobrevivió al accidente.