El suelo del cráter ha sido reconstituido, ya sea por materiales eyectados procedentes del Mare Imbrium o por lava basáltica, por lo que es relativamente suave sin rasgos distintivos.El cráter carece de una elevación central en el punto medio, que puede haber quedado enterrada.Los lados internos parecen haberse alisado ligeramente, muy probablemente como resultado de impactos menores y temblores sísmicos provocados por otros impactos en las cercanías.[1][2] El cráter debe su nombre al historiador de origen sirio del siglo XIV Abu al-Fida.[3][4][5][6][7][8][1] Por convención estos elementos son identificados en los mapas lunares poniendo la letra en el lado del punto medio del cráter que está más cercano a Abulfeda.