En metafísica, la distinción entre abstracto y concreto se refiere a una división entre dos tipos de entidades.
En ontología, los objetos abstractos se consideran problemáticos para el fisicalismo y algunas formas de naturalismo.
Históricamente, la disputa ontológica más importante sobre los objetos abstractos ha sido el problema de los universales.
Otra propuesta popular para trazar la distinción abstracto-concreto sostiene que un objeto es abstracto si carece de poder causal.
Los objetos cuasi-abstractos han suscitado especial atención en el ámbito de la ontología social y la documentalidad.
[14]Estas características las presentan una serie de objetos sociales, incluidos los Estados del sistema jurídico internacional.
[15] Jean Piaget utiliza los términos "concreto" y "formal" para describir dos tipos diferentes de aprendizaje.