[2] Pese a estar involucrado en la conocida como Operación Chacal y tener un teléfono intervenido, no fue imputado.
[2] Fue detenido por este motivo en Ceuta en 2010 y condenado en 2011 a cuatro años de prisión que cumplió en Castellón.
[2] Cumplida la pena, consiguió evitar la expulsión del país, puesto que el juez consideró que no suponía un peligro.
[2] Allí falleció, al explosionar el material que manipulaba.
[2] Un tiempo después de los atentados de 2017 algunas fuentes no contrastadas ganaron popularidad al señalar que Es Satty fue confidente del CNI español desde 2010 hasta los momentos previos al atentado.