Un Abanico de pericón es un abanico de grandes dimensiones muy utilizado, debido a sus dimensiones, en el mundo del teatro y la danza, especialmente el flamenco.
Dentro de la serie filatélica denominada Patrimonio Nacional, correos puso en circulación una serie de tres sellos entre los que se encuentra uno del último tercio del siglo XIX de los llamados pericón.
[1] Con este nombre lo describe García Lorca, en su obra teatral Tragicomedia de Don Cristóbal y la Señá Rosita estrenada en 1937.
[2] Raquel Marí Adsuar[3] en 2016 acabó la elaboración del abanico pericón de encaje de torchón más grande del mundo con un metro de extremo a extremo, el cual se encuentra pendiente de récord Guinness.
Se mostró en la exposición Carmen Tórtola Valencia, pasión por el coleccionismo, junto con una fotografía, del fondo de documentación del Instituto del Teatro, donde se puede ver a Tórtola luciendo este abanico en concreto.