En la actualidad se encuentra en ruinas, sus restos figuran entre los edificios prerrománicos más importantes de Alemania.
Cuatro catálogos del siglo IX demuestran que fue rica en textos clásicos y cristianos.
La abadía fue nombrada reichsabtei (un principado soberano sujeto directa y únicamente al emperador).
Durante la guerra de los Treinta Años Lorsch y sus alrededores sufrieron mucho.
Después el arzobispado de Maguncia recuperó su posesión y la región retornó a la facción católica.
Una parte que quedó intacta y sirvió como almacén de tabaco en los años anteriores a la Primera Guerra Mundial.