En 1983 se finalizó el primer prototipo y se presentó en la Exhibición de Satory de ese año.
Se fabricaron dos prototipos más en 1984; y el cuarto y último fue fabricado en 1985.
El diseño no estaba destinado al Ejército Francés, sino como un sucesor del AMX-32, la versión de exportación mejorada del AMX-30.
Sin embargo los esfuerzos por conseguir clientes extranjeros fracasaron, habiendo siendo España el más serio cliente potencial en considerar el diseño.
En 1990 dejó de ofrecerse para exportación.