En 1945, se trasladó a Antioch College en Yellow Springs, Ohio, donde Higginbotham sirvió como jefe del capítulo de la NAACP en su universidad.
En 1954 entró en el ejercicio privado como miembro de la primera bufete afroestadounidense en Filadelfia.
[2] Higginbotham se convirtió en un partidario fuerte del presidente Kennedy, y con frecuencia asistía eventos en la Casa Blanca.
El Fiscal general Robert Kennedy, quien había llegado a conocer a Higginbotham mediante su trabajo en la FTC, recomendió que el presidente Kennedy lo nominara para ser juez en el Distrito Oriental de Pensilvania, lo que hizo este en 1963.
Tras un retraso planificado por un segregacionista en el Senado, Higginbotham se convirtió en un juez en el Tribunal del Distrito Oriental de Pensilvania.
Higginbotham se quedó en la Casa Blanca esta nocha y continuó aconsejando al presidente en los próximos días.
Higginbotham pasó 13 años como un juez del tribunal de distrito.
Local 542, Int'l Union of Operating Engineers, (en español: Mancomunidad de Pensilvania v.
[3] Higginbotham falló que un juez no debería ser obligado a recusarse solo por ser miembro de un grupo minoritario.
En 1996, Higginbotham sirvió como consejero a Texaco sobre los asuntos de recursos humanos y diversidad.
[5] Publicó su segundo libro, Shades of Freedom: Racial Politics and Presumptions in the American Legal Process en 1996.
[6] Tras la caída del apartheid, Higginbotham consultó a Nelson Mandela y estableció el Fondo South Africa Free Election (SAFE).
Higginbotham arguyó que la conducta de Clinton no merecía la destitución.