Las entradas costaron cinco dólares, 270 personas asistieron al evento y la ceremonia de presentación duró quince minutos.
Esta fue la única ceremonia de los Premios Óscar que no se transmitió en la radio o la televisión.
[2] Al contrario de las ceremonias siguientes, un actor o director podía recibir un premio por múltiples obras en un año.
Emil Jannings, por ejemplo, recibió el premio al mejor actor por su trabajo tanto en El destino de la carne como en La última orden.
[3] Consistió en una cena privada con 36 mesas de banquete,[10] donde 270 personas asistieron y las entradas costaban cinco dólares (equivalente a $68.67 en 2015).
[3] Los actores y las actrices llegaron al hotel en vehículos lujosos, donde varios admiradores asistieron para alentar a las celebridades.