Se interesó desde muy joven en los autores clásicos griegos y latinos.
A los 18 años escribió Discurso sobre la servidumbre voluntaria, en 1548, no siendo publicado hasta 1572 por su mejor amigo Michel de Montaigne.
[1][2] No obstante, durante esos veinticinco años, el texto pasó de mano en mano por ciertos sectores ligados a la política, por filósofos y escritores de renombre.
El Discurso sobre la servidumbre voluntaria es una corta requisitoria de 18 páginas contra el absolutismo.
De esta manera, el Discurso prefigura la teoría del contrato social e invita al lector a una minuciosa vigilancia siempre con la libertad como punto de mira.