Tras su conversión al catolicismo, publica su panfleto antisemita más conocido, La France juive, que le da fama, una fuerte multa y dos duelos.
Los artículos que escribe con este motivo se agrupan en un volumen: Oro, barro, sangre, en 1896.
Drumont lee El Estado judío, manifiesto del sionismo, de Theodor Herzl en 1897.
En los años 1930, Henry Coston reivindicó a Drumont haciendo resucitar La Libre parole.
Georges Darien, en su novela les Pharisiens (1891), imita con éxito el estilo de Drumont para crear el personaje transparente del Ogro, autor de la Galia semita.