Un área silvestre es una región donde la tierra está en un estado natural; donde el impacto de la actividad humana es mínimo, como un territorio virgen.
Muchas naciones han designado áreas silvestres, incluyendo Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Sudáfrica y los Estados Unidos.
La Fundación WILD establece que las áreas silvestres deben tener dos características: estar biológicamente intactas y legalmente protegidas.
Como la población es muy escasa, esto generalmente no es una gran amenaza para la naturaleza.
La cría de renos a gran escala tiene influencia en el ecosistema, pero la ley no introduce ningún cambio en las áreas silvestres.