Micromecenazgo

En términos generales, el micromecenazgo consiste en la difusión pública, por parte de la persona que busca financiación, de la causa o negocio por el que brega, y la financiación mancomunada por parte de prestamistas independientes que simplemente simpatizan con la causa, o persiguen un crédito ofrecido por el prestatario.[2]​ El término proviene del inglés crowdfunding, que se traduce al español como financiación de masas.El uso del método del micromecenaje en la industria cinematográfica se remonta al año 2004, cuando los productores franceses Guillaume Colboc y Pommmeraud Benjamin lanzaron una campaña de donaciones por internet para financiar su película Demain la Veille (Lugar para ayer).En tan solo 3 semanas lograron una financiación de aproximadamente 60 000 euros lo que les permitió rodar su película.[13]​ Este primer proyecto cultural español en ser financiado mediante micromecenazgo ha sido elegido como candidata a los premios Goya 2013.[14]​ En Latinoamérica uno de los primeros casos es el documental creativo Durazno, que además fue producido ecológicamente.Mientras se da a conocer el proyecto que busca financiación, puede llegar a conseguir potenciales clientes de cara al momento al que se lance, e incluso una buena publicidad.Pero lo cierto es que esta es una forma de poder llevar a cabo ideas empresariales con mucho potencial e interés que no podrían llegar ni siquiera a conocerse ni lanzarse de otra forma.Una desventaja es el requisito de divulgación del proyecto cuando aún se encuentra en fase muy temprana, y esto expone al promotor a que su idea sea copiada por otras empresas.