Rudolf Otto

En 1906 llegó a ser profesor extraordinario, y en 1910 recibió un doctor honoris causa en la Universidad de Giessen.

Aunque fue solícito en algunas otras convocatorias, permaneció en Marburgo el resto de su vida.

Otto explicó el concepto de lo misterioso como una «experiencia no-racional y no-sensorial o el presentimiento cuyo centro principal e inmediato está fuera de la identidad».

Acuñó este nuevo término sobre la base de la palabra latina Numen (referida en su significación original a los dioses).

Establece a su vez un paradigma para el estudio de la religión como una categoría irreductible y original en sí misma.