Lothar Hermann
Con su hija Silvia Hermann, localizó en Buenos Aires al genocida nazi Adolf Eichmann, desencadenando su secuestro por Israel y posterior enjuiciamiento en ese país y condena a muerte.[1] Instalado en Argentina desde 1940, luego de haber pasado por Uruguay, Hermann mantiene su lucha contra el nazismo y luego de la Segunda Guerra Mundial se suma a la caza de nazis bajo órdenes del PCA, mezclándose con la comunidad alemana en Argentina y ocultando su identidad judía.[2] Silvia cumplió con su misión y transmitió esa información a su padre, quien constató que se trataba, efectivamente, de Eichmann, uno de los principales genocidas nazis buscados internacionalmente.Ese mismo año Israel organizaría el secuestro de Eichmann, pero desconocería el papel jugado por Lothar y Silvia Hermann, que quedaron en la indefensión.Lothar por su parte fue denunciado por fuentes anónimas y detenido por la policía argentina acusado de ser Josef Mengele, siendo torturado durante quince días.