Imre Nagy

En su etapa como miembro del gobierno húngaro, ocupó diversos cargos, como ministro de Agricultura (1944-1945), ministro del Interior (1945-1946) y presidente de la Asamblea Nacional (1947) hasta que en 1949, a causa de las duras críticas al partido por su política agraria, fue expulsado del Politburó.

En 1951, tras una renuncia pública de sus críticas, fue admitido nuevamente hasta llegar a ser nombrado primer ministro a la muerte de Stalin.

En 1956 y tras la caída de Malenkov, el nuevo gobierno soviético no vio con buenos ojos las reformas húngaras, que podían desembocar en una inestabilidad política total, y se produjeron una serie de revueltas por todo el país, también alimentadas por los acontecimientos de desestalinización en la misma Unión Soviética.

La crisis adquirió asimismo un ángulo político, y llegó a un punto insostenible para Nagy, cuando János Kádár renunció debido a la situación prevaleciente, y el 1.º de noviembre forma el Partido Socialista Obrero Húngaro, para cuatro días después nombrar un gobierno "Revolucionario, Obrero y Campesino" provisional, al tiempo que las tropas del Ejército Rojo entraban en Budapest.

[1]​ Nagy se refugió ese mismo día en la embajada de Yugoslavia donde le habían ofrecido protección.

Estatua de Imre Nagy en Budapest.