El Cántico del Sol , también conocido como Cántico de las criaturas y Laudes Creaturarum (Alabanza de las criaturas), es una canción religiosa compuesta por San Francisco de Asís . Fue escrita en un dialecto umbro del italiano, pero desde entonces ha sido traducida a muchos idiomas. Se cree que es la primera obra literaria escrita en italiano con un autor conocido. [1]
El Cántico del Sol, en su alabanza a Dios, le da gracias por creaciones como el “Hermano Fuego” y la “Hermana Agua”. Es una afirmación de la teología personal de Francisco, que a menudo se refería a los animales como hermanos y hermanas de la humanidad y rechazaba la acumulación material y las comodidades sensuales en favor de la “Señora Pobreza”.
Se dice que San Francisco compuso la mayor parte del cántico a finales de 1224 mientras se recuperaba de una enfermedad en San Damián , en una pequeña cabaña que le habían construido Santa Clara y otras mujeres de su Orden de Damas Pobres . Según la tradición, la primera vez que se cantó en su totalidad fue por Francisco y los hermanos Ángel y León, dos de sus compañeros originales, en el lecho de muerte de Francisco; el verso final, que alaba a la "Hermana Muerte", se había añadido solo unos minutos antes.
Una leyenda que enfatiza el topos de la "luminosidad" dice que no escribió físicamente el Cántico, a causa de su ceguera debida a una enfermedad ocular; pero lo dictó y lo hizo mirando la Naturaleza a través del ojo de la mente. El padre Eric Doyle escribió: "Aunque físicamente ciego, era capaz de ver más claramente que nunca con el ojo interior de su mente. Con una claridad sin igual percibió la unidad básica de toda la creación y su propio lugar como fraile en medio de las criaturas de Dios. Su amor incondicional a todas las criaturas, grandes y pequeñas, había crecido hasta convertirse en unidad en su propio corazón. Estaba tan abierto a la realidad que ésta encontró un lugar en su corazón y él se sentía en casa en todas partes y en cualquier lugar. Era un centro de comunión con todas las criaturas". [2]
El Cántico del Sol se menciona por primera vez en la Vita Prima de Tomás de Celano en 1228.
Texto original en dialecto umbro:
Altissimu, omnipotente bon Signore,
Tue so le laude, la gloria e l'honore et onne benedictione.
Ad Te solo, Altissimo, se konfano,
et nullu homo ène dignu te mentouare.
Laudato sie, mi Signore cum tucte le Tue Creature,
spetialmente messor lo frate Sole,
lo qual è iorno, et allumini noi per lui.
Et ellu è bellu e radiante cum grande splendore:
de Te, Altissimo, porta significatione.
Laudato si, mi Signore, per sora Luna e le stelle:
in celu l'ài formate clarite et pretiose et belle.
Laudato si, mi Signore, per frate Uento
et per aere et nubilo et sereno et onne tempo,
per lo quale, a le Tue Creature dài sustentamento.
Laudato si, mi Signore, per sor'Acqua,
la quale è multo utile et humile et pretiosa et casta.
Laudato si, mi Signore, per frate Focu,
per lo quale ennallumini la nocte:
ed ello è bello et iucundo et robustoso et forte.
Laudato si, mi Signore, per sora nostra matre Terra,
la quale ne sustenta et gouerna,
et produce diuersi fructi con coloriti fior et herba.
Laudato si, mi Signore, per quelli ke perdonano per lo Tuo amore
et sostengono infirmitate et tribulatione.
Beati quelli ke 'l sosterranno in pace,
ka da Te, Altissimo, sirano incoronati.
Laudato si mi Signore, per sora nostra Morte corporale,
da la quale nullu homo uiuente pò skappare:
guai a quelli ke morrano ne le peccata mortali;
beati quelli ke trouarà ne le Tue sanctissime uoluntati,
ka la morte secunda no 'l farrà male.
Laudate et benedicete mi Signore et rengratiate
e seruiteli cum grande humillate.
Notas: so=sono, si=sii (be!), mi=mio, ka=perché, u y v se escriben ambos como u, sirano=saranno
Traducción al español:
Altísimo, omnipotente, buen Señor,
tuyas son las alabanzas, la gloria, el honor y toda bendición;
a ti solo, Altísimo, pertenecen,
y ningún hombre es digno de mencionar tu nombre.
Alabado seas, mi Señor, por todas tus criaturas,
especialmente por el señor hermano sol,
que traes el día y por él das la luz.
Y él es bello y radiante en todo su esplendor.
De ti, Altísimo, él tiene la semejanza.
Alabado seas, mi Señor, por la hermana luna y las estrellas,
en el cielo las formaste claras y preciosas y hermosas.
Alabado seas, mi Señor, por el hermano viento
y por el aire nublado y sereno
y por todo tipo de tiempo por el cual das sustento a tus criaturas.
Alabado seas, mi Señor, por la hermana agua,
que es muy útil y humilde y preciosa y casta.
Alabado seas, mi Señor, por el hermano fuego,
por el cual alumbras la noche y es bello
y juguetón y robusto y fuerte.
Alabado seas, mi Señor, por la hermana Madre Tierra,
que nos sustenta y gobierna y produce
frutos variados con flores y hierbas de colores.
Alabado seas, mi Señor, por los que perdonan tu amor
y soportan la enfermedad y la tribulación.
Bienaventurados los que sufren en paz,
porque por Ti, Altísimo, serán coronados.
Alabado seas, mi Señor, por nuestra hermana Muerte Corporal,
de la cual ningún hombre viviente puede escapar.
¡Ay de los que mueren en pecado mortal!
Bienaventurados los que encontrarán tu santísima voluntad,
porque la segunda muerte no les hará daño.
Alabado seas y bendecido a mi Señor, y dale gracias y sírvele con gran humildad. [3]