Se estima que este asentamiento floreció entre los años 200 y 700 de nuestra era en la ribera del río Lerma.
Fue construido por una civilización actualmente desconocida a la que se le ha atribuido el nombre de El Bajío, aunque se encuentra en discusión si realmente fue un asentamiento chichimeca.
El asentamiento está conformado por diversos conjuntos arquitectónicos, distribuidos en seis grandes grupos, ubicados en la comunidad de San José de Peralta como es conocida en los alrededores, entre los que destacan la zona nuclear y cinco asentamientos periféricos, todos ellos en la ladera del cerro Peralta.
En la periferia se encuentran además otros conjuntos arquitectónicos relacionados, destacando los conocidos como La Yácata del Chan, La Yácata del Fraile, La Crucita y Cerrito de Mares.
La parte restaurada del sitio no alcanza el 10 %, pues sus edificios en ruinas se encuentran ocupados por tierras de cultivo.