Si la lámina tiene las celdillas con medidas para obreras, pueden construir celdas grandes en la parte baja del panal o si tienen espacio entre las alzas; todas las colonias potentes acondicionan celdas para machos, en los cuales la reina depositará huevos no fecundados que darán origen a zánganos.
Copulando en pleno vuelo para caer al pasto muchas veces juntos.
Luego de la cópula, el zángano muere, dado que se desprende su aparato genital.
Sus ojos, al ser grandes, le permiten tener un amplio campo de visión; es sin duda la casta que mejor ve, ya que deben poder localizar a las hembras vírgenes en el vuelo de apareamiento.
Tienen una lengua muy corta, lo cual les impide libar el néctar; por ello son alimentados por las obreras.
Producir calor, se coloca sobre las celdillas con cría reemplazando a las obreras nodrizas para producir calor y calentar la cría, liberando a las nodrizas para otras funciones.
[3] Si el apicultor ha seleccionado una colmena mansa y quiere que este carácter[4] prevalezca, se puede establecer una zona de fecundación.