Gracias a su extraordinario trabajo, se convirtió rápidamente en una de las mejores estudiantes del curso en la universidad.
estudió en dicha facultad hasta octubre de 1941, cuando se ofreció como voluntaria para servir en el Ejército Rojo.
El regimiento estaba formado íntegramente por mujeres voluntarias, desde los técnicos hasta los pilotos, todas ellas de una edad cercana a los veinte años.
[8] El recién renombrado regimiento fue integrado en la 325.º División Aérea de Bombarderos Nocturnos, del 4.º Ejército Aéreo al mando del coronel general de aviación Konstantín Vershinin,[9] inicialmente integrado en el Frente Sur (teniente general Rodión Malinosski), hasta el 28 de julio de 1942 que fue disuelto,[10] luego, el 4.º Ejército Aéreo, fue transferido al Frente Transcaucásiaco al mando del general del ejército Iván Tiulenev y en 1944, al 4.º Frente Ucraniano.
En total durante la guerra, voló en más de 645 misiones de combate nocturno en el viejo y lento biplano Polikarpov Po-2, destruyendo puentes, trenes, tropas y equipo militar del enemigo.
[2] No se encontraron restos del avión, y solo después de la guerra se supo que los residentes locales habían recogido los cuerpos de las dos pilotos muertas.
Fueron confundidas con hombres y enterradas en una fosa común, en su tumba escribieron: «Aquí yace un piloto desconocido».