El 7 de agosto el ejército anglo-indio al mando de Sir William Macnaghten entró en Kabul y Dost Mohamad, tras huir a las montañas por un tiempo, cayó prisionero y fue enviado al exilio a la India.
Los británicos procuraron mantener la calma entre las tribus afganas mediante tributos, sobornos y recompensas.
No tardaron mucho en estallar sublevaciones en Baluchistán, y las columnas británicas eran hostigadas constantemente cada vez que intentaban franquear el paso de Jaiber.
La guarnición británica más próxima se encontraba a 90 km, en Jalalabad, y el camino hasta ella pasaba por varios pasos de montaña cubiertos de nieve, que dificultarían notablemente la travesía.
Del resto sólo sobrevivieron tras el combate el capitán Souter, que consiguió salvar la bandera del regimiento escondiéndola en su cuerpo, y dos o tres soldados, que fueron hechos prisioneros.
El doctor Brydon combatió en la Segunda Guerra Anglo-birmana durante la toma de Rangún (1852) y unos años más tarde, en 1857, siendo doctor del regimiento acantonado en Lucknow se produjo el motín de la India.