- 664) fue un sacerdote sajón de finales del siglo VII.
[1] Sirvió en la casa de Adeodato de Canterbury, Arzobispo de Canterbury, y fue elegido para sucederle por Oswiu de Northumbria y Egberto I de Kent.
Visitó al Papa Vitaliano en Roma, quien lo confirmó en su cargo y le hizo entrega de su palio.
Sin embargo, fue seleccionado y murió antes de su consagración en Roma a causa de la peste bubónica[2] alrededor del año 664.
Entonces el Papa Vitalino nombró a Teodoro de Tarso como Arzobispo.