Dicha pepita tenía un peso refinado de 3123 oz (97,14 kg),[2] y medía 61x31 cm.
[4] Seguidamente, Deason, Oates y unos cuantos amigos llevaron la pepita a las oficinas del London Chartered Bank of Australia en Dunolly, que les pagó 9583£ por ella; fue bautizada como Welcome Stranger.
[8] El oro fundido fue transformado en lingotes y enviado a Melbourne, para su posterior traslado al Banco de Inglaterra.
Empobrecido por sus negocios fallidos, adquirió tierras cerca de Moliagul y terminó sus días como granjero.
[12] Por su parte, Richard Oates nació en torno al año 1827 en Pendeen, Cornualles.