Contrariamente al cónsul que se dedica a un verdadero culto, Wallace Breen busca pintar la Unión Universal como un benefactor de la humanidad, sirviendo así como un simple pero poderoso y paternal casamentero.
pero por alguna razón desconocida se convertirá eventualmente en el gobernante de la Tierra.
Cuando dio un sermón a sus tropas a través de un mensaje pregrabado en la prisión Nova Prospekt, Breen dijo : "Tengo buenas razones para creer que en los últimos años, su posición le ha impedido desarrollar habilidades secretas", refiriéndose al período de estasis que Gordon Freeman experimentó entre Half-Life y Half-Life 2, por primera vez Breen hizo una serie de alusiones implicando que, por primera vez en su vida, Más tarde, mientras hablaba directamente con Freeman, Breen repitió sus insinuaciones, pero fue frenado por la traición de su séquito cuando estaba a punto de discutirlo "más libremente".
Cuando la resistencia humana comienza a aflojar el control del cártel en la Tierra, y Gordon Freeman se prepara para alcanzar al Dr. Breen, el Dr. Breen sigue las instrucciones de un consejero del cártel mientras intenta escapar a través de un teletransporte.
Este último repite a través de una pantalla a la deriva en el vacío del universo un interrogatorio que data de Half-Life 2 '[3] que podría haber marcado al Hombre Libre : "Dr. Freeman, conteste, si puede.
Este discurso se puede escuchar en la Ciudad 17 en pantallas gigantes tanto en la estación como en la calle.
Por lo tanto, la perpetuación de la especie sólo sería posible si la humanidad fuera guiada por sus "benefactores".
Wallace Breen habla directamente con el Dr. Freeman para recordarle que el uso de la fuerza contra la Unión Universal sólo puede conducir a represalias que la humanidad no puede enfrentar.
Según él, la Unión Universal habría perdido la confianza que tenía en la humanidad y ahora podría considerarse engañada por las hermosas palabras de Breen.
Wallace señala que su meta de salvar a la humanidad es común y no tiene sentido competir.
Según el administrador, este éxito no debería conducir en modo alguno a una reducción de las filas de la Milicia, que ya tiene mala reputación con la Unión Universal por no haber capturado a Gordon Freeman.
Sería, pues, el momento ideal para mejorar esta reputación por una serie de éxitos, permitiendo a la Milicia probar su valía y así evitar a la humanidad la alternativa propuesta por los benefactores en caso de incompetencia: la extinción total del hombre.