Vuelo 771 de Afriqiyah Airways

Según los investigadores, el capitán flexionó los slats/flaps a 40 al aterrizar causando que el avión se saliera de la pista y se desorientó tras la información e ignoró las alarmas GPWS.

Durante la aproximación final y hasta el momento del accidente el piloto no había reportado ningún problema a la torre de control.

Inmediatamente después del impacto el avión estalló en llamas destruyendo una casa.

El dueño de la casa, su esposa y sus cinco hijos escaparon ilesos.

El accidente es el segundo más mortal que implica a un Airbus A330 después del vuelo 447 de Air France del 2009, y el segundo accidente aéreo más mortífero ocurrido en Libia por debajo del vuelo 1103 de Libyan Arab Airlines de 1992.

Tras ser trasladado a un hospital para operarle de fracturas en ambas piernas, se corroboró que su vida no corría peligro.

Debido a la guerra civil libia de 2011, estaba obstaculizado la investigación.

Esta acción parece estar destinado a prestar asistencia por el capitán para volar el avión.

Afriqiyah Airways emitió un comunicado diciendo que los familiares de las víctimas que deseaban visitar Libia serían transportados y alojados a expensas de Afriqiyah.

Algunos miembros de la familia querían visitar el lugar del accidente; viajaron al sitio y flores fueron colocadas allí.

Van Assouw fue llevado al Hospital de Sabia'a, a 30 kilómetros (19 millas) al sur-este de Trípoli y posteriormente trasladado al Hospital Al-Khadhra, Trípoli para someterse a cirugías por múltiples fracturas en ambas piernas, el niño no tiene lesiones que hagan correr su vida.

El 15 de mayo, fue trasladado en una ambulancia aérea a Eindhoven en Holanda.