Pepita, desea estudiar una carrera universitaria, pero trabas tanto económicas como personales se lo impiden.
El primero es hijo de Ulises Graziani, un afamado jurista que recién incursiona en la política.
Lleva una vida "alegre", pero en realidad es un amargado a causa de un accidente sufrido en su adolescencia que lo dejó impotente.
Pepita despierta en Luis Raúl un deseo descomunal, que este nunca había sentido, y es entonces cuando enloquece tras ella.
Con la inexperiencia del caso apabullará a Pepita, quien queriendo escapar de las garras de Luis Raúl, evitando sus besos y temiendo ser violada, es rescatada por el perfecto policía salvador Luis Ángel Perdomo.