Virgen de los cartujos (Sevilla, Zurbarán)

Cada lienzo estaba colocado en su correspondiente encuadramiento —de estuco, con un dibujo muy elaborado— en su respectivo muro de la sacristía del mencionado monasterio cartujo.

Ya en 1230-1240 fue descrito por Césaire de Heiterbach en su Dialogus Miraculorum, y pronto fue adoptado por otras órdenes religiosas.

Porta una corona imperial, su rostro expresa tanto ternura como melancolía, y su manto extendido está sostenido por un angelote a cada lado.

Aunque posibles retratos reales, los monjes parecen estáticos ante el milagro, sugiriendo el silencio de los claustros cartujos.

El exquisito detalle de las rosas y jazmines extendidos por el suelo, es posiblemente una alusión a la práctica del rosario.

Virgen de la Misericordia, de Enguerrand Quarton (1452)