Su autor habría trabajado en Amberes y su fecha de ejecución se sitúa hacia el año 1520.
En la actualidad se atribuye al Maestro de la Magdalena de Mansi, un autor anónimo así llamado por haber pintado una Santa Magdalena que pertenecía a la colección del marqués Giambattista Mansi.
Por otra parte, también se ha relacionado esta obra con otras dos pinturas de la Virgen: una se encuentra en el Museo Nacional de Varsovia y está atribuida a un discípulo de Quentin Metsys; la otra pertenecía a una colección particular parisina y desde que fue vendida en 1907 no se conoce más que por una fotografía.
La Virgen María porta una vestimenta amplia de color rojo vivo y un velo.
Mientras, el niño Jesús, que lleva un pájaro en la mano, mira hacia adelante.