Allí se encuentran varios rascacielos, iglesias, como la Basílica Notre-Dame de Montreal, centros comerciales, numerosos comercios en la rue Sainte-Catherine, así como varios restaurantes y cafés.
El RÉSO, o Montreal subterráneo, consiste en 30 km de túneles, que cubren 12 km² e incluye 60 complejos residenciales y comerciales, que suman 3,6 km² de espacio utilizable.
Esto representa un 80% del espacio de oficinas y un 35% del espacio comercial del distrito.
Entre los servicios y edificios accesibles a través de esta red subterránea, encontramos bancos, hoteles, centros comerciales, sedes sociales, edificios universitarios, residencias de lujo, así como siete estaciones de metro y dos estaciones de trenes de cercanías.
El Montreal subterráneo comprende más de 120 puntos de acceso y más de 500.000 personas lo utilizan cada día, sobre todo durante el invierno.