[1] Destaca su iglesia parroquial románica dedicada a San Juan Evangelista.[2][2] El topónimo es un diminutivo derivado del latín villam y alba, con el significado de ‘villa blanca’,[3] que haría referencia al encalado de sus casas.[4] Hacia mediados del siglo XIX, el lugar, que ya formaba parte del mismo municipio que Villaverde de Montejo, tenía contabilizada una población de 60 habitantes.[7] Población de derecho (2000-2020) según el padrón municipal del INE.Depende del municipio Villaverde de Montejo situado a 4 km al NNE[8] al que se incorporó alrededor de 1857 siendo previamente un municipio independiente.