Su origen bien pudo ser poblado céltico o ibérico-romano de nombre Casóbriga.
El rey Felipe IV, en 1616, le hizo la merced de darle jurisdicción civil y criminal.
Esta primera villa de Villaharta estaba dispuesta de la siguiente manera: con sólo 11 casas en torno a una pequeña iglesia o ermita, con una capilla lateral y una posada, formando un eje redial alrededor del lugar sagrado.
Desde el año 2009 se celebra "Aguosto", una fiesta que lleva en su nombre dos reclamos turísticos del pueblo: agua, y agosto, el mes por excelencia escogido por los veraneantes para pasar unos días de vacaciones.
El responsable, Aurelio Teno, ha realizado un estudio minucioso del libro de Tobías en las Sagradas Escrituras y ha conseguido plasmar el carácter viajero del personaje, su extrema pobreza, rodeándolo de simbología para expresar lo que cuenta su historia.
Denominado Las Zahurdillas por su origen, dedicado a la instalación de zahúrdas, también fue una era pública, que los vecinos utilizaban para trillar y aventar las mieses.
Ya en el siglo XVIII, se adquirió esta finca que entonces era un olivar viejo y un huerto.
En la sala Gris situada en la planta baja del edificio, se pueden ver las esculto-pinturas.
En la planta 1ª están las famosas águilas de Teno, realizadas en bronce, cuarzo y geodas.
La planta superior alberga la serie “Tauromaquia” como un homenaje a la bravura y el dolor del toro.
La Calle Pilar Viejo ha mantenido su nombre, este se debía a la existencia de un Pilar en ella y hoy día es una de las calles que se han remodelado, apareciendo adoquinada y sin aceras, desapareciendo las barreras arquitectónicas.
En la Calle Eras, también remodelada, se ha ubicado una pequeña plazoleta en torno a su antiguo pozo con asientos de piedra.
En la actualidad se viene celebrando el fin de semana más próximo a la fecha del día 2.
Entre juegos, cantes y bailes, cada grupo recorría las restantes candelas del pueblo.
La hoguera mayor es la que prepara el Ayuntamiento en un solar anejo a la casa Consistorial.
Sus componentes subidos a un burro, disfrazados de alpechineros y con las caras tiznadas formaban dos grupos.
En este día se preparan diversas actividades para conmemorar la fiesta autonómica.
Además se celebran jornadas de convivencia vecinal en las que participan las asociaciones locales del municipio.
Como dato anecdótico, esta fiesta tiene un componente pagano: es una romería sin santo y consiste en pasar un día de convivencia en el campo cantando, bailando, jugando...
El día anterior a la celebración del Corpus se marca en la calle con tiza el dibujo elegido y el día siguiente, de madrugada, las mujeres más jóvenes y aquellas que pueden hacerlo se encargan de rellenar con serrín el dibujo marcado.
Otras vecinas, colaboran aportando un suculento desayuno a las madrugadoras, basado en chocolate o café caliente con dulces típicos.
Actualmente la Feria se celebran honor a Nuestra Señora del Carmen es una de las fiestas mayores que hay en el municipio.
Por esa fecha se celebraba la feria en Honor al Arcángel Custodio ( posteriormente trasladada a julio por el mal tiempo).
El día 24 de octubre no pasaba desapercibido para los villaharteños, se hacía misa y procesión como el día 7 de mayo, y tras la celebración religiosa los hermanos se invitaban a una chocolatada con churros en un local cercano a la iglesia.
Hoy se mantiene esta tradición gracias al Ayuntamiento y a algunas asociaciones como el AMPA, que cuando llega la fecha hacen por revivir la tradición y enseñárselas a las nuevas generaciones.