Durante la Edad Media, perteneció parcialmente al Monasterio de Samos.
La iglesia ha tenido una existencia azarosa pues fue pasto de las llamas en 1936, donde perdió su cubierta y sufrió daños en su retablo.
En sus inmediaciones, el Petroglifo del Agro do Pepe y la Necrópolis megalítica de Santa Mariña (declarada BIC).
La parroquia da nombre al embalse de Vilasouto, construido en la zona.
Las fiestas patronales en honor a Santa Cruz se celebran los días 2, 3 y 4 de agosto.