Fue director del Observatorio Astronómico de Madrid.
En 1868 empezó a observar las manchas solares, enviando los resultados al Observatorio de Zúrich desde 1876.
También observó las órbitas de Neptuno y Plutón.
[1] Inventó un anemómetro integrador, un elipsógrafo y un método para determinar la velocidad del viento en las capas superiores de la atmósfera mediante la observación de las ondulaciones aparentes del borde de los astros.
En 1897 fue nombrado académico de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, tomando posesión en 1905 con el discurso Exposición de los conocimientos adquiridos sobre los movimientos estelares .